08/03/2021
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Antes de aquel 14 de marzo de 2020, nadie se hubiese imaginado que entrásemos en un estado de alarma nacional y, por tanto, en una crisis económica derivada de la inestabilidad laboral y monetaria ocasionada por la alerta sanitaria.
Desgraciadamente, la mayoría de los sectores se vieron afectados por esta pandemia y muchos de ellos tuvieron que cerrar sus puertas para siempre puesto que la situación económica era insostenible. A pesar del sector hostelero, los de la intermediación de viviendas y los de la construcción también han sido fuertemente golpeados. Los cierres perimetrales y de movilidad han sido determinantes para que se minimizaran los visados de obra nueva el empleo, las compraventas y la oferta y demanda de alquiler de viviendas.
Así, hoy en día, debido al incremento del número de viviendas de alquileres disponibles, distintos estudios indican que el precio ha caído 8% en el conjunto de España con respecto al año anterior. Una cifra que previsiblemente continuará su tendencia a la baja debido a la situación económica actual en la que nos encontramos y a la reducción de los ingresos de los núcleos familiares. ¿A qué se debe esto? A que muchas de las personas que estaban trabajando en grandes ciudades se quedaron sin trabajo, se vieron inmersas en Expedientes de Regulación Temporal de Empleo (ERTE), o el teletrabajó les motivó a volver a sus lugares de origen.
En los grandes núcleos de población, donde el mercado del alquiler es más maduro y está más desarrollado, es donde se han registrado las caídas más pronunciadas. Los distintos análisis publicados en las últimas semanas muestran como algunas en zonas, como Madrid o Barcelona, la variación de los precios de alquileres está rondando el 10% en negativo.
La situación actual no es fácil para nadie pues se abre una gran disyuntiva en la que encontramos dos posiciones enfrentadas: por un lado, los arrendadores que deben seguir recibiendo sus pagos mes a mes, y por otra, los arrendatarios que se retrasan en sus pagos (incidencias) o no llegan a pagar (impagos). Es aquí donde nosotros, Fichero de Inquilinos Morosos, aportamos algo de luz ante nuestros clientes. Así, tanto particulares como profesionales tienen la posibilidad de acceder un diagnóstico detallado de tu potencial cliente y así determinar si es un buen pagador, o por si el contrario, nos encontramos ante un moroso.
Se estima que gracias a las vacunas contra la COVID-19 que ya se están suministrando por toda España se reactive la económica nacional y haya una importante subida del Producto Interior Bruto para los años venideros.