04/04/2019
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Uno de los principales problemas a los que se enfrentan los propietarios y los profesionales inmobiliarios son los impagos de los arrendamientos urbanos. En los últimos años, los casos de morosidad se han incrementado, a la par que el mercado inmobiliario del alquiler se ha expandido. Concretamente, en el último año, los imagos han aumentado un 5,67% de media en el conjunto de España, según los datos del Undécimo Estudio FIM sobre Morosidad en Arrendamientos Urbanos, que se ha presentado hoy.
Una problemática que cobra especial importancia en la Región de Murcia. En concreto, en este territorio, los impagos crecieron más de un 16% durante 2018. Tras ella, se sitúan las Islas Canarias (+12,3%), Navarra (+10,6%) y Andalucía (+10,4%).
La poca homogeneidad del mercado y su diferente evolución, dejan datos muy dispares entre las diferentes provincias españolas. Mientras que existen territorios donde los casos de morosidad se han incrementado por encima del 10%, hay otros donde las variaciones han sido más moderadas. Así, en La Rioja los impagos se elevaron un 1,13%. Territorio al que le siguen Extremadura (+1,82%) y Galicia (+2,37%).
También existen otras regiones donde esta problemática se ha reducido durante el año 2018. Por ejemplo, en Cantabria los impagos se han reducido un 3%.
La mora adeudada también crece
El undécimo Estudio FIM sobre Morosidad en Arrendamientos Urbanos también refleja que los inquilinos morosos adeudan a sus propietarios 6.185 euros de media. El precio de las viviendas de alquiler o el tiempo que transcurre hasta que se soluciona el problema son aspectos que influyen en la cantidad adeudada.
Madrid vuelve a ser la provincia española con los datos de morosidad media más altos. De media, los inquilinos morosos madrileños deben a sus propietarios 9.767 euros. A esta le siguen Baleares (5.572 euros) y País Vasco (7.089 euros). En el lado contrario de la tabla se sitúan Extremadura (3.427 euros), Castilla y León (3.573 euros) y Aragón (3.964 euros).
Principal problema del alquiler
La deuda que contraen los inquilinos morosos con sus propietarios causa un grave perjuicio a estos últimos. Por ejemplo, en España, si tomamos como referencia un inmueble con un precio medio de 750 euros; los arrendadores están más de 8 meses sin percibir las rentas del alquiler.
Ante esta situación, es fundamental que se tomen las medidas preventivas necesarias antes de arrendar un inmueble. No solo es importante conocer los antecedentes del inquilino, también es importante saber si este va a poder pagar la renta.
Por ello, cada vez más arrendadores se aseguran de saber cómo es su inquilino antes de firmar el contrato. Un al que también influyen los últimos cambios legislativos. La limitación de las garantías adicionales ha multiplicado por dos la solicitud de certificados que acrediten la solvencia y fiabilidad de los inquilinos.