
08/10/2020
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Debido a la crisis ocasionada por la COVID-19, uno de los efectos colaterales en la sociedad española, es el aumento de la ocupación ilegal de viviendas. En España, en 2019, se ocuparon ilegalmente 14.621 inmuebles según los datos del Ministerio del Interior.
Los expertos en el sector inmobiliario prevén que la subida de la ocupación ilegal se producirá, entre otros factores, por la disminución del turismo. El descenso del turismo y las restricciones en la movilidad hace que existan multitud de inmuebles vacíos, que normalmente están destinados principalmente al alquiler turístico. Situación en la que muchos ocupas profesionales, aprovechan para asentarse en las viviendas, perpetuando su estancia y poniendo la situación a su favor.

Allanamiento de morada o usurpación
En materia de legislación, en España la ocupación de vivienda es un delito y tiene sanciones con hasta seis meses de cárcel. En el territorio español, existen dos formas de entender una ocupación, allanamiento de morada, cuando en ese momento la casa está habitada o usurpación.
En el caso del allanamiento de morada, las penas son más grandes y es más sencillo que los ocupas abandonen el inmueble. La usurpación, también es un delito, pero el proceso penal es bastante más largo, de 9 a 18 meses de media y hasta puede llegar a ser desestimado por un juez. La usurpación, presenta complicaciones para el propietario como que los ocupas demuestran que es su vivienda habitual.
Debido al aumento de la ocupación de viviendas, este problema y cómo combatirlo, está en el punto de mira de todos. Por ello, queremos hacer una comparativa para ver cómo otros países de nuestro entorno atajan los problemas de ocupación ilegal.
Reino Unido
En Reino Unido, la ocupación es un delito para el que se aplican penas de cárcel de hasta 51 semanas y la multa asciende a 5.000 libras. Según la legislación de este país la policía puede entrar en una casa si esta está siendo ocupada.
El procedimiento más usual cuando un propietario detecta que una vivienda de su propiedad está siendo ocupada es presentar una orden de posesión provisional u orden de posesión interina para deshacerse de los ocupas. Esto puede hacerse los primeros 28 días desde los que se ha ocupado la casa. Una vez reciba la confirmación de la autoridad competente, suele ser el tribunal del condado local, se les entregará a los ocupas ilegales que deberá abandonar la vivienda en menos de 24 horas y no se pueden acercar a ella en los siguientes 12 meses.
Francia
En la vecina Francia, ocupar de manera ilegal una propiedad se castiga con un año de prisión y una multa de hasta 15.000 euros. Cuando se detecta la ocupación, el desalojo será inmediato. Es la administración local quien tiene que valorar si es una ocupación ilegal, en el caso de serlo la ley contempla que se pueda llamar a la policía para que expulse a los ocupantes de inmediato. Los ocupas tienen que dejar la vivienda en 24 horas o la policía les evacuará por la fuerza. A la sanción pertinente se le suman cargos por violencia y destrozos de la vivienda.
Alemania
En Alemania, si una vivienda es ocupada el propietario del inmueble puede acudir a las autoridades y el desalojo se hará en un plazo de 24 horas. La policía una vez recibe la denuncia y hace las comprobaciones pertinentes se encarga del desalojo inmediatamente. La ocupación tiene penas de prisión de hasta dos años y una multa. Depende de la naturaleza de la ocupación.
El caso de Holanda es similar al alemán solo que las penas la multa ascienden hasta los 8.500 euros por ocupación de un inmueble ilegalmente y hasta 20.500 euros, si hay violencia o intimidación.
Italia
En Italia, existen los juicios rápidos en los casos en los que un propietario denuncia que su vivienda ha sido ocupada. Una vez superado el juicio, el desalojo es inmediato. En este caso, como en casi todos los países de nuestro entorno los cargos aumentan si hay intimidación o violencia por parte de los ocupas. La multa es de hasta 1.100€ pero se incrementa con los gastos de la reparación de la vivienda.
Diferencia entre ocupa e inquilino moroso
No debemos caer en el error de confundir un ocupa con un inquilino moroso. Un inquilino moroso es aquel que en un momento dado deja de hacer frente a las cuotas pactadas con el arrendatario. En el artículo de nuestro blog: “Que hacer, y qué no, ante un inquilino moroso en tu vivienda” detallamos cómo proceder en este caso.
Desde el Fichero de Inquilinos Morosos (FIM) consideramos que lo mejor es prevenir, y por ello, tenemos herramientas para estudiar a los posibles inquilinos antes de firmar el contrato de alquiler para asegurar que es solvente y no tiene antecedentes de morosidad. Antes de alquilar tu piso ponte en contacto con nosotros.