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Si eres propietario de un piso que deseas poner en alquiler, seguro que una de tus grandes preocupaciones tiene que ver con la morosidad. Es decir, que en un momento dado deje de pagar el alquiler. Se trata de una situación muy delicada ya que el tiempo promedio de desahucio de un inquilino moroso en España es de 246 días, más de ocho meses.
Es por ello que resulta tan importante implantar distintas soluciones para encontrar al inquilino ideal, solvente y que haga frente al pago de la renta de forma puntual todos los meses.
¿Cómo evitar el impago en el alquiler?
A quién deseas alquilar el piso
Antes de publicar el anuncio de alquiler de la vivienda debes tener muy claro qué tipo de inquilinos buscas: familias, parejas, estudiantes, etc. Por supuesto, esto depende de tus propias preferencias y de las características del inmueble. Por ejemplo, si el piso solo tiene una habitación, difícilmente encontrarás a una familia con niños interesada en su alquiler.
Solvencia
Por supuesto, debes tener muy claro si la persona a la que vas a alquilarle la vivienda es solvente. Más allá de lo que te pueda decir, debes solicitar una serie de documentos acreditativos, como las tres últimas nóminas o el contrato de trabajo en vigor. Si lo consideras necesario, incluso puedes exigir una carta de recomendación. Una forma muy sencilla es solicitarle el Certificado de Solvencia FIM.
Antecedentes de morosidad
Como propietario tienes la posibilidad de comprobar si los distintos candidatos interesados en alquilar tu vivienda tienen antecedentes de morosidad en el mercado del alquiler. Para ello puedes recurrir al FIM, el Fichero de Inquilinos Morosos. Se trata de una gran base de datos que se nutre de las incidencias aportadas por particulares, agencias inmobiliarias y sentencias judiciales.
Para valorar cuál de los candidatos tiene un perfil más solvente, también puedes hacer uso de la herramienta FIM Score. Tan solo tienes que introducir una serie de datos sobre la persona en cuestión: estado civil, situación laboral, ingresos mensuales…
Con estos datos, el sistema valora su perfil de riesgo: AAA, AA, A, B, C y D. Como resulta lógico, alquilar tu piso a una persona con perfil AAA y AA es una buena forma de protegerte ante el posible impago en el futuro.
Confianza
Durante la visita al piso por parte de los distintos candidatos debes prestar especial atención al lenguaje tanto verbal como no verbal de estos. Al fin y al cabo, no todo es cobrar, por lo que también debes valorar cuál es la impresión que te causa la persona para saber si cuidará el inmueble como si fuese suyo.
Desconfía de aquella persona que se muestre como el candidato ideal. Es decir, que prometa no hacer fiestas, tener contratado un servicio de limpieza para mantener la casa siempre impecable, contar con un excelente contrato laboral… Hay grandes profesionales que se dedican a regalar los oídos de los propietarios, y en realidad son una auténtica estafa.
Fianza y seguro de alquiler
La Ley de Arrendamientos Urbanos establece que es obligatorio solicitar una fianza a los inquilinos, la cual debe ser equivalente a una mensualidad de la renta si el inmueble va a ser utilizado como vivienda.