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Hasta hace no mucho tiempo, cuando se hablaba de agentes y profesionales del sector inmobiliario, se pensaba que este tipo de perfiles únicamente eran necesarios a la hora de comprar o vender una vivienda. Sin embargo, en el mercado actual es cada vez más habitual alquilar un piso a través de un profesional.
No hay ninguna duda de que esto supone un coste, pero realmente merece la pena ya que las ventajas tanto para el propietario como para el inquilino son muchas. Claro que para ello es fundamental contar con el mejor profesional inmobiliario.
¿Qué hace un buen profesional inmobiliario en el mercado del alquiler de viviendas?
Estos profesionales se encargan en primer lugar de seleccionar adecuadamente al inquilino. Para ello, hace uso del Fichero de Inquilinos Morosos, de modo que puede identificar a aquellos candidatos que tienen antecedentes por impago. De esta manera, el agente inmobiliario identifica al candidato idóneo, con un perfil financiero solvente.
Su papel es clave en la firma del contrato. Y es que son muchos los propietarios que, por desconocimiento de la ley, incluyen en el contrato de arrendamiento cláusulas que no están permitidas.
Desde el punto de vista del inquilino, contratar a un agente inmobiliario para encontrar una casa en alquiler le garantiza numerosos beneficios. Además, del tiempo que se ahorra al no tener que hacer una búsqueda por su cuenta, el arrendatario puede disfrutar de numerosos servicios (redacción del contrato, gestiones con el arrendador, etc.)
Y, por último, cabe destacar que un buen profesional inmobiliario se asegura de que los pisos en alquiler están en perfectas condiciones. Revisan de forma detallada cada inmueble antes de alquilarlo, garantizando así que cumple con las condiciones de habitabilidad mínimas.
Las habilidades más importantes para ser un buen profesional inmobiliario
Hay una serie de habilidades que son claves para ser el mejor profesional inmobiliario.
- Empatía: esta es casi con total seguridad una de las habilidades clave para tener éxito en el mercado inmobiliario. Un buen agente debe ser capaz de escuchar y ponerse en el lugar de sus clientes, tanto de los propietarios que desean poner en alquiler un piso como de los futuros inquilinos. Debe tener afinidad con las partes para así establecer una relación de confianza.
- Negociación: los agentes inmobiliarios deben ser grandes negociadores. Gran parte de su trabajo consiste a mediar entre arrendatarios y arrendadores para alcanzar acuerdos que sean beneficiosos para ambas partes.
- Profesionalidad: por supuesto, la profesionalidad es clave. Los agentes inmobiliarios tienen un trabajo de responsabilidad ya que manejan elevadas cantidades económicas y propiedades inmobiliarias. Así, deben ser capaces de transmitir la máxima profesionalidad y experiencia en el sector.
- Simpatía: además de la empatía, la simpatía es otra habilidad que debe tener un buen profesional del mercado inmobiliario. El agente debe mostrarse simpático y amable.
- Formación: este sector es uno de los más complejos y, además, uno de los que cambia a mayor velocidad. Es por ello que resulta tan importante la formación y renovación continua. Por lo general, los agentes se especializan en una determinada área, como los pisos de alquiler.
- Confianza: y, por último, la confianza. Si los agentes inmobiliarios no son capaces de transmitir confianza a sus clientes, lo tienen todo perdido. Es importante que sean honestos y sinceros.
- Seguridad: los profesionales inmobiliarios pueden garantizar la máxima seguridad y garantías a sus clientes con la ayuda de Fichero de Inquilinos Morosos. Los Agentes Homologados FIM tienen a su disposición diversas herramientas con las que evaluar a los candidatos que se han interesado por un inmueble.
Convertirse en un buen profesional inmobiliario en el mercado del alquiler requiere tiempo. Este tipo de perfiles deben estar en continua formación y, además, especializados en un determinado ámbito. Si a las habilidades puramente académicas y profesionales le sumamos cualidades de tipo social, como la empatía, la confianza o la simpatía, el futuro del agente puede ser brillante.