https://www.fimiberica.com/Blog/BPSEmailArticle/968
El de agente inmobiliario es un perfil profesional muy cualificado que lleva a cabo un amplio abanico de tareas en su día a día. Hay quienes creen que simplemente se encarga de enseñar la propiedad a los futuros compradores o arrendatarios y de ejercer a modo de mediador entre las partes. Pero lo cierto es que sus funciones van mucho más allá, e incluyen la ejecución de todos los trámites burocráticos de las operaciones inmobiliarias, la realización de estudios de mercados, el asesoramiento… Por lo tanto, un agente inmobiliario cumple roles muy distintos y cubre responsabilidades en una gran selección de campos como la venta, el marketing, la gestoría, la asesoría legal….
¿Cuáles son las funciones de un agente inmobiliario?
En la actualidad cada vez son más las personas interesadas en vivir en régimen de arrendamiento. Aunque España siempre ha sido un país de propietarios, la tendencia está cambiando a un ritmo de vértigo. Por este motivo cada vez son más los agentes inmobiliarios que se dedican a actuar a modo de intermediarios entre la parte arrendadora y arrendataria.
- Administración: un agente inmobiliario debe hacer frente a una gran cantidad de papeleo. Es importante que conozca de forma detallada la normativa vigente en el mercado inmobiliario para redactar los contratos de compraventa o arrendamiento, realizar las gestiones oportunas con la notaría… La burocracia ocupa buena parte de las funciones diarias de cualquier profesional del sector.
- Comercial: las tareas comerciales de un agente inmobiliario son muy numerosas, y engloban el trato con los clientes, la promoción de los inmuebles, la gestión de las personas interesadas para seleccionar al mejor comprador o arrendatario y la búsqueda de nuevos clientes, entre otras.
- Negociación: la negociación es la parte más decisiva de todas. Se trata de la etapa final, que llega después de muchas horas de visitas y llamadas, y por lo general se le dedica entre un 20 y un 30 por ciento del tiempo. Sin embargo, no hay que olvidar que todas las tareas y responsabilidades llevan a la venta o alquiler de la vivienda, y para ello la negociación es esencial. Es importante que sepa captar las necesidades de los clientes para no sólo satisfacerlas, sino también anticiparse a ellas.
Estas son las funciones generales de un agente del sector inmobiliario. Pero ¿a qué se dedica en su día a día? Las principales tareas que lleva a cabo son: reunirse con potenciales compradores o arrendatarios, actualizar las propiedades disponibles para la venta o el alquiler, enseñar los inmuebles y explicar los detalles más relevantes, llevar un registro de las visitas, asistir a ambas partes y realizar el papeleo que sea necesario.
Agente homologado FIM
Para dar un salto de calidad en su servicio y mejorar su carrera profesional, un buen agente inmobiliario debe convertirse en agente inmobiliario homologado FIM. La principal ventaja es el acceso ilimitado al Fichero de Inquilinos Morosos. El FIM es el único registro oficial que existe a nivel nacional de la morosidad en el mercado del alquiler. Por lo tanto, si el cliente tiene varias propuestas de alquiler, el agente podrá consultarlas todas.
También tendrá acceso a FIM Score para realizar análisis de perfiles de manera 100% objetiva para saber si los futuros arrendatarios son personas de fiar. Este es un servicio que atrae mucho a los clientes porque todos quieren estar seguros de que alquilan su casa a una persona seria y de confianza, que no ha tenido problemas de impago en el pasado y que va a pagar la renta en el tiempo y la forma acordados.