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España ha dejado de ser un país de propietarios. Cada vez son más las personas, sobre todo jóvenes, que apuestan por vivir en régimen de arrendamiento. El número de hogares que viven de alquiler supera por primera vez el 17%, según datos del Instituto Nacional de Estadística. Baleares, Madrid, Cataluña y Canarias son las comunidades autónomas en las que personas residen de alquiler.
De forma paralela, en los últimos cinco años ha aumentado de forma significativa la morosidad en el mercado del alquiler, pasando a convertirse en el principal problema para los propietarios. La situación se ha agravado de forma considerable este año debido a la pandemia del coronavirus, de forma que en agosto 2020 las incidencias de impago superaban el 7%, frente al 2,7% de agosto de 2019.
Una situación que se complica si tenemos en cuenta que en España se tardan entre nueve y diez meses de media en echar a un inquilino moroso. Se trata de un proceso largo y complejo que obliga a recurrir a la vía judicial para recuperar la vivienda y las rentas impagadas.
Por todas estas razones es tan importante tomar medidas preventivas antes de firmar el contrato de arrendamiento de un piso. Cuando un posible inquilino muestra interés por la vivienda, hay que evaluarle y conocer cuál es su situación laboral y económica. Dejarse llevar por la primera impresión nunca es una buena idea.
FIM Score, la mejor medida preventiva contra la morosidad en el alquiler
FIM Score se presenta como la herramienta definitiva para prevenir la morosidad en el alquiler. Si eres un propietario que quiere alquilar su casa de forma segura y con plena tranquilidad, te recomendamos al 100% su uso.
Está abierto tanto a particulares como a empresas y te da todas las respuestas sobre tu futuro inquilino. El funcionamiento de FIM Score es muy sencillo. Solo debes introducir una serie de datos sobre el arrendatario y el inmueble: DNI, ingresos netos mensuales, renta mensual y código postal. Con esta información, realiza una comprobación en el Fichero de Inquilinos Morosos para detectar posibles antecedentes de impago, clasifica el perfil del candidato comparándolo con el de miles de inquilinos a nivel nacional y puntúa la calidad de la operación.
La calidad de la operación se puntúa de manera objetiva, fundamentada y en tiempo real gracias a la base de datos FIM y al algoritmo predictivo. Para que te resulte sencillo de entender, la puntuación se engloba en una escala de siete categorías y colores: AAA, AA, A, B, C y D, de mejor a peor.
¿El resultado? Un informe en el que aparece toda la información que necesitas tener sobre el inquilino que va a alquilar tu casa.
¿Cómo echar a un inquilino que no paga?
Si a pesar de utilizar la herramienta FIM Score te encuentras con un inquilino que no hace frente a sus obligaciones, debes reclamarle la cantidad pendiente a la mayor brevedad posible, desde el primer mes de incumplimiento. Puedes hacerlo a través de un burofax o una carta certificada con acuse de recibo. Si no es posible llegar a un acuerdo amistoso, hay que recurrir a la vía judicial y presentar una demanda de desahucio por impago de alquiler, en el que le reclames al arrendatario las rentas impagadas.
Lo que nunca puedes hacer es tratar de echarle ‘por las malas’, llevando a cabo acciones como cambiar la cerradura o cortar los suministros. De hacerlo, el inquilino moroso podría demandarte por coacciones o allanamiento de morada.
En definitiva, si eres un propietario preocupado por prevenir el impago del alquiler de tu inmueble, confía en FIM Score.