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La situación actual del mercado del alquiler es muy diferente a la de hace apenas unos años. Por un lado, la demanda de pisos en alquiler, sobre todo en ciudades grandes como Barcelona o Madrid, está alcanzando máximos históricos. Y, por otro lado, la morosidad por parte de los inquilinos es cada vez más habitual, lo que supone un gran problema para los arrendadores.
La morosidad en el mercado del alquiler
A falta de conocer los datos de este 2019, el pasado año 2018 el índice de morosidad aumentó en nada más y nada menos que un 5,7%. En términos absolutos, la deuda promedio que los inquilinos tienen con sus caseros es de 6.186 euros.
Claro que el incremento de la morosidad no se da de manera equitativa en todas las comunidades autónomas. La primera en el ranking es Murcia, donde la morosidad aumentó el pasado año 2018 un 16,2% respecto a 2017. Le siguen Canarias (12,3%), Navarra (10,6%) y Andalucía (10,4%). Respecto al volumen medio de la deuda, la Comunidad de Madrid es la que ocupa la primera posición: los inquilinos morosos debían a sus arrendadores 9.767 euros promedio.
Pero ¿a qué se debe este incremento tan notable en la morosidad en el mercado del alquiler?
En primer lugar, el aumento exponencial de la renta. Muchos inquilinos llegan “justos” a final de mes, de forma que cualquier tipo de gasto imprevisto provoca serias dificultades para pagar la renta. Y, en segundo lugar, es interesante señalar que los salarios en ningún caso crecen de forma paralela al precio de la vivienda, lo que causa una gran inestabilidad, sobre todo entre los jóvenes.
¿Qué puedes hacer tú?
Teniendo estos datos en cuenta, si tienes un piso en propiedad que quieres poner en alquiler, seguro que la morosidad de los inquilinos es una de las cosas que más te preocupan. Seguro que a estas alturas ya sabes que comprobar la solvencia de los futuros inquilinos es clave. Debes solicitar un contrato de trabajo en vigor, así como las tres últimas nóminas.
Vamos a ponernos en la situación de que seis de las once personas interesadas en alquilar tu casa cumplen con este requisito. ¿Cómo elegir al mejor inquilino? A veces dejarse llevar por la primera impresión no es una buena idea, así que te proponemos la mejor solución para tomar una decisión 100% objetiva y evitar futuros problemas: el FIM, o Fichero de Inquilinos Morosos.
Realizando una comprobación muy sencilla puedes saber si alguno de los candidatos tiene antecedentes por impago en el mercado del alquiler, y así descartarlo.
Continuando con el ejemplo anterior, si de las seis personas solventes y con contrato de trabajo fijo, dos de ellas han sido morosas, mejor descartarlas. El Fichero de Inquilinos Morosos es el único registro oficial que existe en España sobre la morosidad en el mercado del alquiler. Una gran base de datos que se nutre de la información aportada por particulares, agentes inmobiliarios y sentencias judiciales.
Ahora ya te has quedado con cuatro candidatos a inquilino. ¿Cómo elegir al mejor de ellos de una forma objetiva? Con FIM Score, una herramienta que evalúa el perfil de riesgo de cada uno de ellos. Introduciendo una serie de datos básicos sobre su situación laboral y su solvencia, así como determinados datos sobre la vivienda, FIM Score calcula cuál es su perfil de riesgo: AAA, AA, B, C y D. Lo hace gracias a una gran base de datos y a un algoritmo predictivo innovador. Como resulta lógico, debes quedarte con aquel inquilino cuyo perfil de riesgo sea AAA, el más seguro de todos.