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Si tienes un piso en propiedad que has decidido alquilar, seguro que te interesa saber cómo elegir al mejor inquilino. Lo cierto es que no es una decisión sencilla ya que son muchos los factores a valorar. El objetivo es dar con aquel arrendatario que sea solvente y pague la renta todos los meses en el tiempo y la forma acordados. Además, debe cuidar el piso como si fuera suyo. Así que, ¿cuáles son las cualidades que debes buscar en un inquilino?
¿Quién es un buen inquilino?
Vamos a empezar definiendo quién es un buen inquilino. Es una persona que no tiene nada que ocultar, que se muestra honesta y transparente desde el primer momento. Además, tiene una excelente habilidad tanto de comunicación como de negociación. Ante cualquier tipo de malentendido o problema se mostrará comprensivo y empático. En definitiva, una persona que se compromete a nivel legal y personal, a cumplir con sus obligaciones. Si eres capaz de encontrar a un inquilino así, puedes estar completamente seguro de que la relación entre vosotros será buena.
Solvencia del inquilino
Lo más importante es que el arrendatario del piso sea solvente económica y financieramente. Son dos los aspectos más importantes que como propietario y futuro arrendador debes considerar de los candidatos. Por un lado, el nivel de ingresos. Para ello debes solicitar una nómina o la declaración del IRPF en caso de autónomos. Y, por otro lado, la estabilidad laboral.
Si el candidato no puede aportar las suficientes pruebas de solvencia, puedes solicitar garantías adicionales, además del mes de fianza obligatorio que exige la ley. Uno de los más frecuentes es el aval bancario. De este modo, si en algún momento el inquilino deja de pagar la renta, una entidad financiera se hará cargo del importe adeudado.
Por supuesto, te recomendamos consultar el Fichero de Inquilinos Morosos a la hora de elegir el arrendatario del inmueble. Se trata del único registro que existe a nivel nacional sobre la morosidad en el mercado del alquiler. Introduciendo una serie de datos básicos sobre el candidato podrás saber si tiene o no antecedentes por impago en otras casas de alquiler en las que ha vivido anteriormente.
Una vez descartes a todos aquellos inquilinos morosos, ¿cómo elegir al más adecuado de todos? Imagina que tienes a cinco candidatos con una buena estabilidad laboral y un salario más que suficiente para hacer frente al pago de la renta. Seguro que seleccionar a uno de ellos te resulta muy complicado.
Pues bien, para ello puedes utilizar la herramienta FIM Score. Debes introducir una serie de datos básicos del candidato y de la vivienda: renta mensual, salario… Gracias a un algoritmo innovador, te indica cuál es su perfil de riesgo: AAA, AA, A, B, C, D y E. Si el perfil de riesgo de alguno de los candidatos es AAA o AA, no busques más: es el mejor.
Es lógico que a la hora de alquilar tu casa tengas cierta desconfianza. Aunque como propietario eres totalmente libre de alquilar la casa a quien mejor te parezca, debes tener en cuenta las características del inmueble y a qué tipo de público puedes dirigirte. Son muchos los casos en los que un inquilino, que en un principio parece perfecto, ha acabado siendo un auténtico estafador. Es importante saber a quién alquilas tu vivienda y asegurarte de antemano que el arrendatario conoce las condiciones.
Siempre y cuando las dos partes estéis de acuerdo, podéis pactar la duración del contrato de alquiler de la vivienda. Si es inferior a tres años, la Ley de Arrendamientos Urbanos, indica que, una vez llegado el día de vencimiento del contrato, se prorrogará de manera obligatoria por plazos anuales hasta que el alquiler alcance como mínimo tres años.