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Cuando tomas la decisión de alquilar tu vivienda, es normal preocuparse por la posibilidad de enfrentarte a un inquilino moroso. Aunque algunos creen que esto es poco común, la morosidad en el mercado del alquiler ha aumentado en los últimos años. Actualmente, el proceso de desahucio por falta de pago puede llevar hasta 246 días.
Sin embargo, no debes descartar la idea de alquilar la vivienda. Existen herramientas que pueden ayudarte a identificar posibles inquilinos morosos antes de firmar el contrato de arrendamiento, como el Fichero de Inquilinos Morosos (FIM), una base de datos oficial que recopila información proporcionada por particulares y agentes inmobiliarios, incluyendo registros de desahucios.
Inquilinos morosos, un problema en auge
En un mercado de alquiler cada vez más competitivo, elegir al mejor inquilino puede ser todo un desafío. Aunque tener un contrato de trabajo vigente puede indicar solvencia, no garantiza la fiabilidad del inquilino. Además, confiar únicamente en entrevistas personales puede ser peligroso, ya que algunos estafadores se hacen pasar por inquilinos solventes, llegando incluso a pagar varios meses por adelantado para luego dejar de pagar el alquiler intencionalmente. Lidiar con estos inquilinos puede ser un proceso complicado, ya que suelen estar familiarizados con las estrategias legales para prolongar su estancia en la propiedad.
Seguro de impago de alquiler
¿Te suena el seguro de impago de alquiler? Es una opción muy solicitada actualmente debido al aumento de los inquilinos morosos. Básicamente, funciona así: si el arrendatario deja de pagar, la aseguradora te reembolsa hasta un máximo de X mensualidades, dependiendo de la prima que abones.
Pero, antes de optar por este seguro, es importante que conozcas sus tres principales desventajas. Primero, la aseguradora debe aprobar al inquilino, evaluando su solvencia financiera. Además, si el inquilino incumple el pago, enfrentarás un montón de trámites burocráticos para recibir la compensación. Y por último, el proceso de desahucio puede extenderse más allá del periodo que cubre la póliza, dejándote con posibles pérdidas.
Fichero de Inquilinos Morosos
Para protegerte de inquilinos morosos, especialmente de los okupas, el Fichero de Inquilinos Morosos (FIM) es una herramienta esencial. Esta base de datos recopila información sobre personas que han incumplido con sus obligaciones de pago de alquiler en el pasado, brindándote una visión clara del riesgo potencial que representa un inquilino.
Al evaluar a un posible arrendatario, el FIM Score proporciona un perfil detallado de riesgo, permitiéndote tomar decisiones informadas sobre si alquilar o no tu propiedad. No debes temer al FIM, ya que es una herramienta rápida y sencilla para obtener información crucial antes de firmar un contrato de arrendamiento.
Verificar el Fichero de Inquilinos Morosos es un proceso accesible tanto para particulares como para profesionales del sector inmobiliario. Al introducir ciertos datos, como la renta mensual del inmueble y la identificación del potencial inquilino, se genera un detallado informe. Este informe revela si el individuo tiene historial de impagos en alquileres anteriores, permitiéndote evaluar su confiabilidad antes de firmar el contrato de arrendamiento. Además, proporciona una evaluación del nivel de riesgo, indicando la probabilidad de que se convierta en moroso en el futuro.
Cada propiedad es única, con sus propias características, por lo que poder evaluar el riesgo potencial de morosidad de un inquilino es esencial para prevenir futuros problemas. El impago del alquiler es un asunto serio que puede requerir acciones legales si no se resuelve de manera amistosa, lo que conlleva costes y tiempo adicionales. Evitar estas situaciones desde el principio es clave para proteger tus intereses como propietario.
