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En los últimos años ha aumentado de forma exponencial el número de personas que viven en régimen de arrendamiento en España. Una tendencia que se explica por un amplio abanico de factores: trabajadores jóvenes con bajos salarios, inestabilidad laboral, dificultad de acceso al crédito para la compra de una vivienda… A esto hay que sumar la profunda crisis derivada de la pandemia del coronavirus, que ha hecho que los inquilinos morosos se tripliquen en 2020. Por lo tanto, para evitar cualquier tipo de problema a medio y largo plazo, los propietarios evalúan muy bien a los candidatos a la hora de alquilar sus viviendas.
El Fichero de Inquilinos Morosos es actualmente el único registro nacional de carácter oficial que existe de la morosidad en el mercado del alquiler. Si has vivido en otros pisos como arrendatario anteriormente y has dejado de pagar la renta en el tiempo y la forma acordadas con el arrendador, es muy probable que te haya inscrito en el FIM. Se trata de una gran base de datos en la que particulares y agentes inmobiliarios pueden inscribir a los inquilinos morosos de forma totalmente gratuita.
¿Qué consecuencias tiene en el Fichero de Inquilinos Morosos?
La consecuencia más directa de la morosidad en el mercado del alquiler es que lo tendrás muy complicado para encontrar un propietario que desee tenerte como inquilino. Un arrendatario que no cumple con sus obligaciones supone un gran problema si el arrendador no consigue llegar a un acuerdo amistoso con él. Llegado a este punto, tiene que presentar una demanda de desahucio por impago de alquiler, y comenzar así un proceso judicial que puede durar meses.
Ningún propietario quiere verse en una situación como esta, así que cada vez son más las personas que consultan el Fichero de Inquilinos Morosos para comprobar si alguno de los candidatos a convertirse en inquilino tiene antecedentes por impago. De ser así, lo rechazan automáticamente porque, tal y como dice el dicho, “más vale prevenir que curar”.
El Certificado de Solvencia FIM es un servicio que ofrece el Fichero de Inquilinos Morosos de comprobación de los antecedentes de impago. Teniendo en cuenta que la morosidad en el mercado del alquiler está en máximos históricos, son muchos los propietarios y futuros arrendadores que solicitan a los candidatos este documento. Para ti es la mejor forma de presentarte en tu búsqueda de un piso de alquiler. Además, puedes solicitarlo 100% online y tiene validez trimestral. Es mucho más sencillo de conseguir que los tradicionales avales bancarios.
Con el Certificado de Solvencia FIM puedes demostrar que no has tenido incidencias previas en el pago del alquiler, algo esencial hoy en día. FIM colabora con ICIRED, una fuente de datos de gran prestigio, para dar mayor garantía de la puntualidad con los pagos. De acuerdo, no tienes antecedentes de morosidad. Pero ¿qué probabilidad tienes de convertirte en moroso en un futuro? En función de la renta a pagar y de tus ingresos mensuales, también se calcula la ratio de solvencia y el nivel de gastos en la renta que puedes asumir como inquilino.
Teniendo todo esto en cuenta, parece lógico pensar que ser un inquilino moroso no es en absoluto buena idea. En primer lugar, porque tendrás problemas con tu arrendador actual. Y, en segundo lugar, porque si te inscribe en el Fichero de Inquilinos Morosos lo tendrás muy complicado para encontrar un piso en alquiler en el futuro. Cuando firmas el contrato de arrendamiento te comprometes en firme a pagar la renta en el tiempo y la forma acordados.