https://www.fimiberica.com/Blog/BPSEmailArticle/1235
Si quieres poner en alquiler tu vivienda, quizá creas que encontrar a un buen inquilino, aquel que pague la renta en el tiempo y la forma acordados en el contrato de arrendamiento y cuide el inmueble como si fuera suyo, no sea tan complicado. Pero los datos demuestran lo contrario.
Según el “Estudio sobre Morosidad en Arrendamientos Urbanos en España”, entre junio de 2021 y el mismo mes de 2022 los impagos en el mercado del alquiler aumentaron un 5,2% de media en España. A esto hay que sumar que en este periodo, los inquilinos dejaron a deber a sus arrendadores 6.874 euros de media, una cantidad un 7,9% por encima de la deuda contraída el año anterior.
Teniendo esto en cuenta, es indispensable consultar el Fichero de Inquilinos Morosos (FIM). Se trata del primer registro de morosidad en el mercado del alquiler abierto a empresas y particulares. Una herramienta colaborativa en la que se incluyen las incidencias reportadas por agentes inmobiliarios, propietarios y sentencias judiciales sobre morosidad en España. Por lo tanto, sirve para evitar alquilar la vivienda a personas que ya han tenido problemas de impago en el pasado.
Uno de los principales temores de los propietarios en la actualidad es el de alquilar su vivienda a un inquilino moroso. Aunque existen diferentes formas para garantizar el cobro del alquiler, como el seguro o el aval bancario, es preferible asegurarse desde el principio de elegir a un arrendatario solvente y sin antecedentes de impago. Para ello, el FIM es clave.
Y es que, existen perfiles de morosos profesionales, capaces de engañar a los propietarios. Sin embargo, si alguien los ha tenido como inquilinos anteriormente y los ha registrado en la base de datos, todos los demás sabrán que no es una buena idea firmar con ellos un contrato de arrendamiento.
No, no se trata de ser desconfiado, sino precavido. A continuación te exponemos algunas de las razones por las que es tan importante consultar el FIM a la hora de seleccionar al mejor inquilino para alquilar tu vivienda.
Demanda de desahucio por impago del alquiler
¿Sabes lo que ocurriría si en un momento dado el inquilino deja de pagar la renta? Si no consigues llegar a un acuerdo amistoso con él, tendrás que iniciar un proceso judicial con la presentación de la demanda de desahucio por impago del alquiler. Para ello, tendrás que contratar los servicios profesionales de un abogado y un procurador. El proceso se puede demorar varios meses, durante los cuales no recibirás el dinero del alquiler y, además, no podrás disponer de la vivienda.
Los morosos profesionales se saben la ley al pie de la letra, por lo que pueden hacer que las cosas se compliquen mucho para ti. Una vez reciben la notificación judicial, generalmente se suelen oponer a la demanda, a pesar de que saben que no tienen la razón, para ganar tiempo. El motivo es que en este caso debe celebrarse un juicio. Si todo va bien, el juez te dará la razón y dictará sentencia fijando la fecha de lanzamiento.
Vandalismo
Algo que suele ocurrir muy habitualmente es que los inquilinos morosos destrocen la casa y la fianza no sea suficiente para reparar los desperfectos. En este caso, tendrás que iniciar un proceso de reclamación de daños y perjuicios por los daños materiales al inmueble. Para ello, puedes hacer uso de la garantía de defensa jurídica de tu seguro de hogar, pero para que la compañía aseguradora acepte el caso tienes que demostrar que los daños han sido causados por el inquilino, con un informe que así lo recoja.