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En los últimos años, ha aumentado de forma notable la demanda de pisos en alquiler. Aunque tradicionalmente España siempre ha sido un país de propietarios, la tendencia poco a poco está cambiando. Cada vez son más los hogares en régimen de arrendamiento, aunque todavía estamos lejos de otros países europeos como Alemania, Austria, Dinamarca y Francia.
Seguro de impago de alquiler y solvencia del inquilino
Teniendo en cuenta, alquilar un piso es una gran inversión en la actualidad, con la que obtener unos ingresos regulares en forma de renta. Sin embargo, hay una serie de precauciones que los propietarios deben tomar para evitar inquilinos morosos. El hecho de que un arrendatario no pague el alquiler se convierte en un gran problema para el propietario, sobre todo si depende de ese dinero para pagar la hipoteca de su vivienda actual, por ejemplo.
Por este motivo, han nacido los seguros de impago de alquiler. La principal cobertura que ofrecen es que, si en algún momento el inquilino deja de pagar la renta, tú recibes la cantidad correspondiente de la compañía aseguradora, durante un máximo de X mensualidades, según la prima que pagues.
Ahora bien, para contratar un seguro de este tipo la compañía aseguradora tiene que hacer un estudio de solvencia al inquilino. Algo lógico teniendo en cuenta que, en caso de que este no pague la renta, va a ser ella quien tenga que hacerse cargo del pago.
Certificado FIM
Si quieres hacer las cosas bien y dormir tranquilo sabiendo que has alquilado tu vivienda a un inquilino solvente y sin antecedentes de impago, te recomendamos que le pidas el Certificado de Solvencia FIM. Es una medida preventiva del impago en el mercado del alquiler por la que cada vez apuestan más particulares y agentes inmobiliarios.
Aunque el seguro de impago está bien, al final tienes que esperar a que la compañía aseguradora te dé el visto bueno y, además, pagar una prima mensual o anual. En cambio, si a los candidatos que realmente estén interesados en alquilar tu piso les pides el Certificado de Solvencia FIM, puedes tener toda la información que necesitas sobre ellos de forma completamente gratuita para ti.
Se trata de la alternativa al tradicional resguardo bancario. Un documento que les permite a los posibles inquilinos acreditar que tienen un buen nivel de solvencia y que no han tenido incidencias previas de pago. FIM colabora con ICIRED, una fuente de datos muy importante incluida en el Certificado de Solvencia para dar mayor garantía de la puntualidad con los pagos del solicitante.
¿Qué tipo de información puedes saber de tu futuro arrendatario con este documento?
- Incidencia de pago: el Fichero de Inquilinos Morosos es el único registro nacional de morosidad en el alquiler. Una gran base de datos en la que tanto particulares como agentes inmobiliarios inscriben a los arrendatarios morosos. Por lo tanto, con el Certificado de Solvencia puedes comprobar si ha dejado de pagar la renta en viviendas de alquiler en las que haya residido anteriormente.
- Ratio de solvencia: además, el futuro inquilino puede demostrar su ratio de solvencia en base a sus ingresos mensuales y la renta a pagar. El nivel de solvencia se calcula a partir de una ratio de referencia en el mercado inmobiliario que se actualiza de forma periódica.
Como puedes comprobar, el Certificado de Solvencia FIM es todo lo que necesitas para alquilar tu inmueble con la tranquilidad de que el inquilino no va a ser moroso.