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La morosidad en el alquiler creció un 3,9% el año pasado en nuestro país, donde un inquilino moroso adeuda de media más de 6.000 euros, según se desprende del X Estudio FIM sobre morosidad de arrendamientos en España’, una radiografía de los impagos en el alquiler registrados entre el 1 de enero de 2017 y la misma fecha de este año que fue presentada este miércoles en Madrid.
El análisis, que detalla las variaciones porcentuales y la cuantía media de la morosidad tanto a nivel nacional como por provincias, revela que la Comunidad de Madrid lidera la clasificación de comunidades con impagos más elevados, registrando una media de 9.717,92 euros, un 59% más que la media nacional. Le siguen otros territorios donde los precios del alquiler también han subido en los últimos meses, como Baleares (8.234,96 euros), País Vasco (6.950,51 euros) y Cataluña (6.599,83 euros).
Extremadura (3.307,29 euros), Castilla y León (3.489,24 euros), La Rioja (3.706,43 euros) y Aragón (3.933,27 euros), son las comunidades con impagos más bajos de España debido que poseen mercados del alquiler pequeños y de precios reducidos.
Las mayores subidas porcentuales, según el informe, se han registrado en Melilla (12,36%), Cantabria (9,66%), Navarra (8,95%) y Murcia (7,53%), regiones donde el aumento de la morosidad va ligado al crecimiento actual de sus mercados de arrendamiento. Los impagos se mantuvieron prácticamente estables, con ligeras subidas, en La Rioja (0,20%), Galicia (1,84%), Extremadura (2,61%) y Castilla-La Mancha (2,77%), comunidades con parques de alquiler reducidos y precios moderados.
La influencia del alquiler turístico en la morosidad
El estudio de Fichero de Inquilinos Morosos (FIM) apunta a uno de los efectos secundarios de los alquileres turísticos: la reducción de la morosidad en las regiones donde se expande. Así ha ocurrido en Islas Baleares (-6,45%) y Cataluña (-2,76%), donde las bajadas se deben al progresivo desplazamiento del arrendamiento residencial tradicional en favor de este fenómeno en auge, que apenas cuenta con casos de impago.
La morosidad también decreció el año pasado, aunque por motivos distintos, en Asturias (-2,02%) y Ceuta (-2,08%). En estos casos, según el informe, debido a que estas regiones presentan pequeños mercados de arrendamiento donde las rentas son bajas.
Hasta 18 meses sin cobrar el alquiler
El estudio concluye que la morosidad continúa siendo uno de los grandes problemas del mercado español del alquiler. Según recuerda FIM, un impago de 6.000 euros -la media nacional-, supone que un arrendador se quede sin percibir las mensualidades entre 8 y 10 meses. En casos extremos como el de la Comunidad de Madrid, el tiempo sin cobrar el alquiler puede llegar a los 18 meses.
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