https://www.fimiberica.com/Blog/BPSEmailArticle/175
En muchas ocasiones, cuando un inquilino nos deja de pagar las rentas, nos dejamos llevar por el cabreo y el desconocimiento y actuamos de una forma que no nos ayuda a subsanar nuestro problema, sino que lo acrecienta. En esta entrada te damos las claves para tener un alquiler seguro.

En el último año, el importe medio de la morosidad en alquileres fue de 6.424,99 euros, según el último estudio sobre morosidad en arrendamientos urbanos que publicamos en Fichero de Inquilinos Morosos (FIM).
Cuando nos enfrentamos ante un impago en el alquiler y queremos subsanar la situación cuanto antes, muchos, toman medidas arriesgadas contra el inquilino moroso profesional. Sin embargo, acciones como entrar en la vivienda alquilada, cambiar la cerradura o cortar los suministros, son delitos penados por el Código Penal por los que el propietario podría ser denunciado y sancionado.
¿Qué hacer entonces?
En primer lugar, cuando se sufre un impago en el alquiler, lo recomendable es contactar con el arrendatario y conocer los motivos, además de buscar alcanzar un acuerdo para subsanar la deuda. Si el inquilino moroso profesional, persiste en su conducta, se debe proceder a realizar una comunicación fehaciente (burofax, sms certificado…) para reclamar las cantidades adeudadas.
Este tipo de comunicados, son el paso previo, para la inscripción del inquilino en el Fichero de Inquilinos Morosos, en el caso de no abonar el importe de las rentas, y para la posterior demanda de desahucio.
Tal y como hemos contado muchas veces en nuestro blog, de media, un propietario necesita más de 246 días para desahuciar a un inquilino moroso y recuperar su vivienda. Por eso, es muy importante contar con un buen asesoramiento profesional y con abogados especializados en materia de arrendamientos urbanos.
Medidas preventivas antes de alquilar
La clave para tener un alquiler seguro es tomar medidas preventivas. Para ello, desde Fichero de Inquilinos Morosos, te recomendamos que antes de alquilar la vivienda, consultes la probabilidad real de impago del futuro inquilino y sus antecedentes arrendatarios. De esta forma, esquivarás a posibles inquilinos morosos.
Por otro lado, es fundamental, proteger el alquiler con un contrato de arrendamiento donde quede bien reflejadas las obligaciones y derechos de cada una de las partes. En FIM, ponemos a tu disposición nuestro modelo de contrato.
Por último, no debes dejar de controlar el pago del alquiler y el cumplimiento de las obligaciones del arrendatario, para ello, una monitorización de las rentas te ayudará a realizar un seguimiento del correcto funcionamiento de tu alquiler.
¿Tienes dudas sobre alquiler? ¡Te ayudamos a resolverlas!